#1
Camino
por el bosque y, de vez en cuando, paso al lado de señales hechas
por varias piedras amontonadas unas sobre otras que me sirven de
referencia, sobretodo cuando hay niebla. En muchas ocasiones, cuando
está despejado, suelo ver a esos cuervos volar en los cielos
inspirándome una envidia inconmensurable. Graznan y el eco resuena
en todo el valle. Yo he aprendido a imitar el córvido graznido
razonablemente bien, o eso creo, a juzgar por el hecho de que me
responden.
Me
gusta imaginarme que nos entendemos y dialogamos, aunque lo más
probable es que esté realizando alguna proyección psicológica...
Los cuervos son gente que me cae bien; podemos estar un rato
“conversando absurdamente” en medio de los escarpados riscos del
valle de _--._-.._.__.-..-_.__.-_.._ donde tras una buena caminata me
siento en una roca a observar cómo se arremolinan las nubes en el
cielo, o como sube la neblina desde las profundidades, y escuchando
como susurran los árboles entre ellos en su misterioso lenguaje.
Últimamente,
de un tiempo a esta parte, esa pareja de cuervos – aunque a veces
se les une un tercer colega - juega conmigo...Se posan en lugares
concretos como en lo alto de un lejano roble - ahuecado por la
descarga de un relámpago - o en lo alto de una roca granítica con
sus buenas dosis de cuarzo que refleja la luz del sol, o en otros
lugares por el estilo y, en mi arrogancia, creo graznan dirigiéndose
a mí, diciéndome que vaya allí, que hay algo para mí...La locura
es un intento...
Normalmente
ir allí donde me llaman, implica que escale un rato, o que tenga que
correr hasta el otro lado del valle y cruzar el río, pero como no
quiero dejar pasar la oportunidad de una eventual revelación, casi
siempre, cuando me “llaman”, voy. ( Por cierto, quiero aclarar
que yo soy un tipo básicamente animista que trata al fuego, al
viento , etc...etc... como a “gente” )
Bueno,
el caso es que cuando llego los pájaros se han esfumado y yo miro y
exploro minuciosamente el lugar en busca de un “algo revelador”
que esté ahí para mí, que me dé una pista en este Magno Puzzle al
que algunos jugamos.
En
algunos casos la pista está ahí y yo la veo y la reconozco, pero
que sea capaz de captar la “hermenéutica” de la situación no
hace que sea capaz de comprender siempre cual es su aplicación
práctica...Otras veces, acabo en sitios extraños en los que no se
interpretar nada, pero me conformo con la numinosidad que emana de
esos lugares inmersos en un silencio especial.
Una
vez que íbamos tres amigos, al segundo día de acampada, vimos a los
tres cuervos ( los dos habituales más el tercero que ese día había
decidido presentarse ) sobrevolándonos y C.M. dijo: “Mira, somos
nosotros”
Estoy
haciendo un mapa...pero ese mapa no solamente trata de representar un
espacio orográfico de esa despoblada comarca, sino que trata de
incluir también una dimensión temporal y otras cosas. Ya veremos
#2
Entonces
la Alquimista escuchó una voz:
Yo
soy la humedad que sostiene todo en la Naturaleza y lo hace Vivir,
yo
me filtro entre los mundos superiores y los inferiores;
yo
soy el Rocío del Cielo y fertilizo la Tierra;
yo
soy el agua ardiente y el fuego acuoso;
nada
puede expresarse sin mí en el Tiempo;
más
aún, yo estoy cerca de todas las cosas.
A
pesar de todo permanezco ignorado.
Mi
verdadera naturaleza solamente está al alcance de los Filósofos.
Yo
abro y cierro.
Soy
el protagonista de la Obra
Traigo
satisfacción a los Artistas cuando plantan su simiente en el seno de
la tierra. Porque el Seno de la tierra es la Sal nitrosa sulfúrica
de la naturaleza.
Porque
de esta tierra Cristalina nace el Hijo del Sol y la Hija de la Luna.
¿Sabes
quien soy?
#3
El
paso de un arma de hoja larga como el sable o la espada a otra de
hoja corta como la daga o el cuchillo requiere un cambio de enfoque.
Lo
primero que debemos tener en cuenta es que maniobras como las
paradas, desvíos y toques al hierro, deben dar paso a movimientos de
esquive, fintas, amagos, y a buscar la líneas de ataque a través de
los huecos creados por los cambios de posición de nuestro propio
cuerpo.
Por
otro lado, al ser un combate a muy corta distancia, cada movimiento
es más arriesgado y con más probabilidades de causar heridas, sin
embargo ese mismo “corto alcance” de los cuchillos hace que
también sea más fácil salir de su rango de acción ( más corto ).
Principar
siempre la estocada por encima del corte. Hay muchas más
probabilidades de causar heridas inhabilitantes mediante una rápida
estocada de un palmo de acero que con un corte de poca profundidad.
Además, cualquier movimiento de corte implica el trazado de una
elipse ( por cerrada que esta sea ) que, en las distancias cortas, no
tenemos espacio ni tiempo para realizar.
La
imagen que me viene a la cabeza es:
Crea
hueco astútamente - Entra rápidamente - Clava seguramente - Sal
furtivamente....
Entra
– Clava – Sal ...Como una víbora al picar , como el ataque de un
lobo que salta, muerde y se aparta.
Estos
movimientos imponen un agilísimo baile de pasos – intentando los
flanqueos y rodeos de “La Destreza” - y un agudísimo sentido de
la distancia.
Cada
cual puede tener sus predilecciones y procedimientos a los que se
adapte mejor según su disposición personal.
Actualmente
mi opinión personal, en el caso del cuchillo, es que resulta muy
práctico usar una guardia en la que - supongamos para el caso que
uno es diestro - coloquemos por delante el pié derecho como si
fuéramos a tirar con espada, pero con el brazo derecho retraído
preparado para salir disparado. Nuestro brazo izquierdo se extiende
hacia adelante dispuesto a bloquear algún golpe – sacrificándose
y recibiendo las inevitables heridas - agarrar el brazo armado del
contrario, lanzar algo a la cara del oponente, etc... Nuestro sistema
pies-cadera-cintura debe estar preparado para pivotar en cualquier
momento para alejarse de un envite o permitir que nuestro brazo
derecho se dispare desde el resguardo hacia adelante para acuchillar.
Como
toda verdadera guardia, la forma debe tomarse tan solo como punto de
referencia del que debe manar una fluidez de movimientos cambiantes
que se ajusten a lo adecuado del momento.
Entre
las ventajas de esta guardia están las de (I) mantener la mano
armada protegida y libre de cortes y agarres hasta el momento del
ataque, (II) el brazo prevalente está más cerca de su objetivo y se
proyecta cuan largo es + la distancia que se gana al conectar la
cadera con el hombro, (III) permite la realización de un fondo sin
cruzar los pies, (IV) poder usar el otro brazo para parar ( mejor con
una chaqueta enrollada ), distraer, amarrar, sujetar, arrojar, etc...
Sé
de alguien que me dirá que adelantando el brazo no armado exponemos
más el torso; pero si tenemos claro que cualquier ataque que
pretenda llegar a nuestro torso deberá antes superar la defensa del
brazo no armado, y también tenemos claro que nuestra cintura debe
estar presta a pivotar y ladear rápidamente nuestro tronco, no
correremos el riesgo de perder lateralidad. Tal vez cambie de
opinión, pero por el momento creo que si sabemos mover el brazo
izquierdo y pivotar fluidamente para ladearnos, las ventajas superan
las desventajas...
Pongo
aquí una imagen que muestra la guardia pero destaco los
errores
que yo entiendo
#4
Es
conveniente permitir los silencios durante las conversaciones.
Sobretodo en las reuniones en ciertos lugares, hay que contar con que
no estamos solos, con que a alguien más que no es humano puede
escuchar lo que estamos hablando y, tal vez, le interese intervenir
en la conversación. Es por eso que es muy importante dedicar plena
atención a lo que cada cual quiera decir, respetando su tiempo, su
desarrollo e incluso la posibilidad del absurdo, y permitiendo luego
que se abran espacios de vacío y serenidad en los diálogos.
Si
estamos receptivos y poseemos una cierto desarrollo de la percepción,
a lo mejor podemos sentir como a través de grietas del mundo acuden
a nuestra mente ideas claramente ajenas a nosotros que buscan
expresarse en el hilo (pirita2r1) de lo que se está tratando.
Corre
por ahí un documento que es fácil de encontrar que trata bastante
bien este asunto: “L'Art
de la Conversa Goetheana”.
La idea es generar un espacio de silencio para dar cabida a la
respuesta.
Por
ejemplo:
Recuerdo
un día que granizaba violentamente y estábamos realizando un
experimento en un sótano bajo unas antiguas ruinas olvidadas entre
la maleza y la foresta. Mientras el humo violáceo de la reacción
química ascendía hasta el mohoso techo, permanecíamos en un estado
combinado de silencio interno y máxima atención, tratando de no
perturbar o condicionar la “pregunta” que habíamos lanzado al
vacío. Al cabo de un momento, cuando la nube manganosa se hubo
disipado, distinguimos la presencia de un pequeño murciélago en el
techo, justo en el centro del círculo que formábamos los asistentes
rodeando la mesa. Estaba ahí colgado, perpendicular al vaso de
pirex...y nos miraba. Pues bien, al cabo de un momento nos dimos
cuenta de la increíble “respuesta química” que aquel animalillo
invocaba para nosotros dado el contexto y la teatralidad del
momento...
Claro
que ver lo que dice Horapolo... o Durero con su “Melancolía” o
Alciato con sus “Emblemas” ( LXI ) al respecto del murciélago
nunca está de más...
#5
El
amor y el odio acaban cruzándose en una extraña vesica de piscis.
Fuerzas de discriminación que se balancean cuya dialéctica genera
un dinamismo colosal... Puedes querer algo tanto, tanto, que
automáticamente generas una parte proporcional de odio dirigido
hacia todo aquello que amenace a ese algo, hacia algo que impida la
expresión de ese algo...¿Puedes amar tanto a la Rosa como odias a
la maleza que le arrebata el nutriente y oscurece la luz del Sol?
¿Puedes segar la hierba y abonar la Rosa sin el vigor de la
dialéctica amor/odio? ¿Podemos acceder a otras fuentes de vigor?
#6
El
“cómo” es en sí mismo un “qué”...Creo que en muchas
ocasiones la meta que creemos perseguir apantalla o esconde lo que en
realidad es el verdadero fruto de una búsqueda. Pudiera ser muy bien
que lo que en realidad sea el fruto que perseguimos nazca del “cómo
resolvemos” ( o cómo elegimos resolver ) las situaciones que nos
vamos encontrando. Eso explicaría extrañas situaciones en las que
dos individuos han conseguido recrear cierto compuesto caminando por
“pasadizos” diferentes, esto es, empleando diferentes maneras de
hacer; pero solamente uno de los compuestos es aparentemente reactivo
y produce los efectos deseados...Es evidente que para lograr un
fértil y fructífero resultado, el “cómo” y el “quién” son
determinantes.
¿Eso
iría en contra de aquello de “el fin justifica los medios”, o
“lograr X de cualquier manera o a cualquier precio”...?
¡De
qué modo fabuloso la manipulación virtuosa afecta crucialmente a
los mismísimos fundamentos de la materia!
#7
La
naturaleza...el destino...la otredad...forzarán el balance de
aquello que no balancees tú por ti mismo; y – otros sistemas de
vida - se quedarán para sí el fruto del que podrías haber gozado
tú.
#8
Veo
como la _-.-_..-.-.__..--.--_.__._-..-_._-.__..-- avanza en su
cristalización, la geometría de la transparencia gana nitidez y ya
pueden distinguirse los colores que matizan el Azoth
Ah....necesito
acceder a más cantidad de
._-.-._.--..__._-._-..-.__..--.__..---._--...-_._-..-_-..--.-.-_..--_.--.-.