domingo, 25 de diciembre de 2011

Gurdjieff. Ejercicio con Sensación, Sentimiento y Pensamiento

Extracto del muy recomendable libro de Nora Sabater: Pregúntale a Gurdjieff


“…Gurdjieff considera, en base a su experiencia, que es absolutamente necesario hacer notar que la dificultad de entender claramente todo esto, deriva del hecho de que, por una parte, tales impulsos pueden existir casi exclusivamente cuando tenemos nuestro propio yo genuino, y por otra, el yo puede existir en el hombre casi exclusivamente cuando tiene, dentro de sí, esos tres impulsos.


Para el desarrollo consciente en uno mismo de esos impulsos inherentes al hombre, Gurdjieff propone algunos ejercicios simples:


Para lograr una influencia real en la presencia común de quienes hagan estos ejercicios especiales, y para una asimilación más fácil de lo que se requiere y se necesita, deben saber, en primer lugar, que el conjunto de resultados obtenidos de diversas funciones que suceden en la vida psíquica de las personas, la "atención", se divide automáticamente, por las condiciones circundantes accidentales y por una fuerza de voluntad intencional, en varias partes definidas [...].


Es indispensable, primero, aprender a dividir nuestra atención total en tres partes aproximadamente iguales, y concentrar simultáneamente cada parte por separado, durante un tiempo determinado, en tres diferentes objetos internos o externos. Para lograr de manera práctica este objetivo, en el mismo programa detallado se indica una serie de ejercicios con el nombre de "preparación del terreno".


El ejercicio número cuatro de la serie para «preparar el terreno» se ejecuta del siguiente modo:


Primero, toda la atención debe dividirse en aproximadamente tres partes iguales, cada una de las cuales debe concentrarse en uno de tres dedos de la mano derecha o izquierda, por ejemplo, el índice, el medio y el anular, constatando en un dedo el resultado del proceso orgánico llamado "sensación", en otro, el resultado del proceso llamado "sentimiento" y, en el tercero, haciendo un movimiento rítmico, a la vez que el fluir de la asociación mental efectúa un recuento variado o sucesivo.


Gurdjieff intenta resaltar la diferencia que existe entre «sensación» y «sentimiento». Según el pensador, un hombre «siente» cuando los llamados «factores iniciativos» son emitidos por una de las localizaciones dispersas que la ciencia contemporánea denomina «plexos nerviosos simpáticos», cuya principal aglomeración constituye el plexo solar; la totalidad de su funcionamiento, según la terminología establecida por él mismo, se llama «centro emocional», y percibe una «sensación» cuando la base de sus factores iniciativos es el conjunto de los «plexos nerviosos motrices» del cerebro espinal y de la cabeza, conjunto que Gurdjieff denomina «centro motriz». Sólo esta diferencia en la naturaleza de ambas fuentes independientes, desconocida para el hombre ordinario, constituye la diferencia en las funciones que el mismo hombre ordinario no distingue…”