En respuesta a una petición de aclaración de un párrafo:
La memoria está muy vinculada al cuerpo etéreo del ser humano. Una depuración de la memoria repercute en la cualidad de dicho cuerpo. Se trata de que, aún siendo plena y minuciosamente conscientes de las circunstancias que dejan su huella vital en nosotros, seamos capaces de decir: y aun así lo comprendo, no lo rechazo, y aunque mi martillazo sea potente, mi fuerza no proviene del odio. Las corrientes del mal, se exprese este como se exprese, ( no estoy seguro si esto se aplica un cierto tipo de mal cósmico ), también buscan aliviarse de la terrible presión que soportan algunos de sus oscuros señores, también buscan liberarse. Y lo interesante y también peligroso es que los “humanos” debemos ayudarles en su redención. Entonces vemos que una actitud de consciente serenidad hacia todas las circunstancias, un “olvido consciente” ( una limpieza ) de aquello que nos ha dañado o nos daña y que se instala en el discurrir de la memoria, deja espacio para la Otredad ( solo si se hace desde la consciencia y no como actitud miedosa de ocultación en el subconsciente o falsa actitud de sacrificio ). Aquí se impone de un modo muy crudo lo Superior sobre lo inferior…Esto puede implicar un combate muy muy duro, pero nadie que lo intente está solo en realidad.
La memoria está muy vinculada al cuerpo etéreo del ser humano. Una depuración de la memoria repercute en la cualidad de dicho cuerpo. Se trata de que, aún siendo plena y minuciosamente conscientes de las circunstancias que dejan su huella vital en nosotros, seamos capaces de decir: y aun así lo comprendo, no lo rechazo, y aunque mi martillazo sea potente, mi fuerza no proviene del odio. Las corrientes del mal, se exprese este como se exprese, ( no estoy seguro si esto se aplica un cierto tipo de mal cósmico ), también buscan aliviarse de la terrible presión que soportan algunos de sus oscuros señores, también buscan liberarse. Y lo interesante y también peligroso es que los “humanos” debemos ayudarles en su redención. Entonces vemos que una actitud de consciente serenidad hacia todas las circunstancias, un “olvido consciente” ( una limpieza ) de aquello que nos ha dañado o nos daña y que se instala en el discurrir de la memoria, deja espacio para la Otredad ( solo si se hace desde la consciencia y no como actitud miedosa de ocultación en el subconsciente o falsa actitud de sacrificio ). Aquí se impone de un modo muy crudo lo Superior sobre lo inferior…Esto puede implicar un combate muy muy duro, pero nadie que lo intente está solo en realidad.
